Miyo, Crónicas 2012.
Vinimos de las estrellas y volveremos a ellas, sólo queda despertar. Darnos cuenta.
Los sueños se han vuelto realidad y las oraciones han sido respondidas.
Somos más grandes de lo que nos han contado, cuerpo, identidad y linaje.
Somos hijos de dios y reflejamos la perfección divina. Esta es nuestra herencia eterna
Siempre hemos disfrutado espiritualmente de un potencial ilimitado
Seres multidimensionales e inmortales desde el principio de los tiempos
Capaces no sólo de subir a los cielos, sino de hacerlos descender sobre la Tierra
Llegó el momento de ser felices y de proclamar la buena nueva a las cuatro direcciones.
Miyo, Crónicas 2012.