Extracto de La magia de los sentidos sutiles. Emilio Fiel
Uno se sienta y da permiso a su Yo Superior para comunicarse
inter dimensionalmente. Así crea una energía que puede ser vista
y sentida, que nos permite suspender las creencias, y dejar que las
funciones corporales se ralenticen por unos minutos, para que surja
la concentración. Entonces el Espíritu habla a los seres humanos
como siempre por milenios lo ha hecho. Ahora se ha levantado
el velo y se han ajustado las rejillas del planeta, lo que permite
un mayor intercambio de información, especialmente porque han
cambiado los procedimientos. Los que vienen conocen nuestros
secretos (no sólo los asuntos psíquicos o íntimos) sino lo que escondemos
en el adn, quienes somos, y quienes fuimos en muchos
lugares. Conocen nuestras alegrías, tristezas y frustraciones…
La magia de los sentidos sutiles. Emilio Fiel