Crónicas Planetarias 2020-12: por Miyo Fiel-junio 2020
CRÓNICAS PLANETARIAS 2020- nº12
Por Miyo Fiel
“La resurrección de la carne exige que todo el bagaje emocional, astral o lunar
sea purificado de tu envoltura etérea y de la zona sagrada o sacra de la columna.
No basta con unirte a la luz en el corazón, tienes que descender al fuego del infierno
y liberar las creencias, bloqueos, emociones negativas y obsesiones personales.
Así que además de despertar la corona de la cabeza y el cinturón del pecho
tienes que encender también el triángulo de fuego del sacro, la kundalini radiante,
transcendiendo la sexualidad y el apego material, además de la conciencia familiar.
Solo así resucitará la materia viva, pues en el sacro se une el cuerpo crístico
con la envoltura etérica, en 132 días de transmutación luminosa del carbono al silicio
tal y como prometió hace dos mil años el Christos, nuestro hermano solar”
- Los humanos oscuros y los hijos de Belial
El alma puede venir a esta tierra a experimentar la luz, la oscuridad o ambas
y lo hace con todo derecho pues ese es el sentido de la tercera dimensión.
No por eso te vuelves un desalmado o te conviertes en un reptoide,
sigues teniendo siete chakras y una conciencia evolutiva que progresa.
Eres un alma inmortal y ninguna acción concreta va a cambiar esa realidad.
Desbrocemos el lenguaje y entendamos de una vez que la sombra u oscuridad
es nuestro derecho de nacimiento, lo mismo que la luz, el amor y la hermandad
y la conciencia aprende de ambas esquinas sin dejar de ser hijos radiantes del Sol.
Otra cosa son los seres depredadores que tienen su hogar en los mundos astrales
y se alimentan de energías y emociones humanas: inorgánicos, entidades y arcontes.
A su lado están los humanos preadámicos con solo tres chakras y alma de rebaño,
junto a los illuminattis híbridos, con una mezcla genética humana y reptiliana.
Pero no te confundas al dividir simplistamente el mundo entre buenos y malos.
Incluso las almas eternas que viven en la conciencia enajenada de la matrix
pueden elegir seguir por el camino de la personalidad, el poder y el control,
y renunciar por largos eones de tiempo a la libertad de la Nova Terra,
Muy especialmente si han tenido pocas vidas sobre la superficie del planeta.
Y a la contra hay seres depredadores que aceptan la oferta de una vida consciente
y deciden que es hora de abrirse a las emociones y de experimentar el amor.
Por eso muchos seres de las razas de los dracos, arcontes, reptoides y grises
están eligiendo unirse al ejército florido de la luz y ganarse un alma inmortal,
aunque la mayoría de ellos será simplemente expulsada de nuestra existencia.
La radiación estelar que llega a borbotones no permite las bajas frecuencias astrales.
Aclárate: el Espíritu Ometeotl se presenta siempre en dualidad, como el aliento,
y ambos extremos son imprescindibles para la vida y evolución de la conciencia.
Como dos equipos adversarios en un partido, ambos se necesitan para el show
y es tan importante el que gana como el que pierde, ninguno existe sin el otro.
Día-noche, bueno-malo, luz-oscuridad, tonal y nagual, materia-energía, cielo-tierra.
Los malos no son reptoides asesinos y depredadores, sino maestros de la noche,
y muchas veces son ellos los que mas ayudan al despertar de la humanidad dormida.
Así que entiende y extiende la buena nueva: las emociones son humanas,
la manifestación en caliente de los sentimientos desbordados es signo de vida,
mientras que los seres desalmados son fríos y crueles, nada les importa fuera de si.
¡Las emociones positivas o negativas son siempre humanas!
Pueden expresar alegría y tristeza o ira y rencor, pueden ofender o elevar,
pero el que seas un cabronazo no hace de ti un draco sediento de sangre.
Por tanto la quinta dimensión no es una dura conquista sino un derecho,
el hogar natural para los cuerpos de gloria que han sido esclavizados por la matriz,
porque el alma inmortal no conoce la enfermedad ni la degradación ni la muerte.
Y mientras tanto venimos a la Tierra a aprender de los extremos de la dualidad,
del dolor y del placer, de ser devotos o fumetas, de ser ascetas o salidos sexuales.
Y de eso se aprovechan desde hace miles y miles de años ciertos seres astrales
que llegaron del fondo del espacio y se asentaron en la cuarta dimensión emocional,
sabiendo que llegaría un día que tendrían que abandonar esta realidad
porque se produciría un cambio extraordinario de frecuencia solar y planetaria.
Ahora ese día ha llegado, el contrato (‘quien tiene poder puede usarlo’) cancelado
y comienza un nuevo tiempo para una Tierra que ha sufrido demasiados excesos.
Solo los seres que evolucionan desde los planos materiales y astrales desaparecerán,
hacia algún planeta material, regido por las limitaciones que conocemos tan bien.
Para ellos es real el plan evolutivo de Darwin, porque el cuerpo físico es su mundo,
y ni siquiera son capaces de imaginar una realidad más sutil, llena de amor y alegría.
- Los virus de mi corazón
El plano astral está lleno de basura emocional, de ira y de creencias rígidas,
todos los residuos y las aguas fecales del inconsciente colectivo humano.
A lo que hay que unir la influencia nefasta de los seres de oscuridad
e incluso del inconsciente del planeta, que ha acumulado mucha rebeldía
contra las acciones destructivas y polucionantes de la conciencia de rebaño.
Energías parasitarias que son un exutorio del cuerpo y de la mente humanas.
Tantas fantasías, angustias, proyecciones y locuras cargadas de miedo y dolor.
Eso es el virus, un medio de purificación astral ante el descenso de la luz
provocado por la ruptura que la oscuridad ha establecido en el interior del Ser,
ese conjunto de estados emocionales que no han sido recapitulados ni resueltos.
Nuestra vida manipulada ha creado un corte entre el psiquismo y el Espíritu
y las aguas astrales estancadas se han vuelto un cenagal lleno de parásitos
depredadores que se alimentan de la energía y conciencia de los seres humanos.
Los arcontes o ángeles caídos, los inorgánicos, los annunakis y los reptilianos
han proyectado a lo largo de milenios sus creencias y deseos lejos de la Unidad,
para cortar imaginariamente nuestro vínculo eterno con la naturaleza espiritual.
Y todo esto manejando la mas sofisticada tecnología de control astral de masas.
Quién no esté hipnotizado con estas realidades holográmicas está a salvo
Y ningún virus ‘emocional’ podrá infectarlo, si ha elegido el Amor sobre el miedo.
Eleva tu nivel vibracional y ningún virus astral podrá alcanzarte ni encontrarte.
Todo es función del encendido de tus fuegos, tus momentos de éxtasis o fusión,
tu disfrute del silencio mental y de la contemplación íntima en la naturaleza…
Cada momento tienes que vibrar fuera del pantano de la mente inferior o parásita
y mantener encendidos los fuegos purificadores del corazón amoroso.
Por tanto los virus son creaciones de tercera dimensión, hijos del miedo,
creados por la psicosfera humana del planeta a lo largo de siglos y milenios
Son invenciones astrales de los seres carbonados y no manifestaciones divinas,
que pasan a ‘somatizarse’ hoy por el enorme descenso de luz supraconsciente
hasta que dejamos de alimentar estas energías oscuras, agitadoras y parásitas.
Las noticias tv, Hollywood, el uso interesado de la ‘ciencia’, los laboratorios,
empujan a muchas almas hacia los brazos de quienes gobiernan el mundo,
y cuando la oleada de luz llegue, arrasándolo todo, no podrán soportar el impacto,
no resistirán la sensación de amor y de expansión interna, y simplemente morirán.
Su cuerpo no resistirá la elevación de frecuencias de la Nueva Tierra,
en la que solo sobrevivirán los que han sido marcados por el fuego liberador
y están dispuestos a despojarse de su persona y a fundirse con la eternidad.
Así que el virus es una oportunidad para que expulses la oscuridad del cuerpo,
para liberarte de una vez de todo lo que no es ni será tu naturaleza original.
Esto sucede con muchas enfermedades de ‘limpieza’ que son bendiciones, enfermedades que duran unos pocos días y no se vuelven nunca crónicas.
Lo crónico exige trabajo interior para liberarte de lo negativo que has asumido.
- Nunca dejes que el miedo guíe tus pasos.
Sean problemas económicos, sean virus, los eructos del Sol o los volcanes
deja de creer que hay enemigos, todo sirve al Plan divino sobre la Tierra.
Todos estos sucesos, previsibles o misteriosos, no tienen poder sobre ti
y solo se presentan para que te afirmes mas en la unidad y en el amor.
“La luz que desciende va a destruir todo lo que fue levantado contra natura
por las fuerzas involutivas y oscuras que controlaron nuestro pasado”.
Mientras, los medios difunden tonterías sobre quien es el responsable
y expanden el miedo hacia los terribles enemigos que nos acechan.
Claman al cielo que solo la ‘ciencia’ nos podrá salvar, las instituciones mundiales,
la medicina y las reuniones de la unión europea, lo fundamental se olvida
y nadie se refiere a las cuestiones esenciales que ocurren en el cosmos.
“El virus nos enlaza al mundo astral, y manifiesta nuestro temor a lo divino,
descompone la vida y causa estragos en lo físico, pero no toca el alma”.
Se trata de que actúes de una vez desde lo interno, desde la Presencia Yo Soy
y dejes de dar poder a los subproductos astrales o emocionales que te atacan.
Puede ser que la tecnología salte en pedazos por una tormenta solar
o el desastre financiero colapse la economía mundial, o una nueva pandemia,
pero lo esencial es si esas situaciones despiertan la conciencia humana
y hacen que gire su mirada hacia la luz del espíritu, lo demás no cuenta.
Aunque cualquier ‘buen padre de familia’ defenderá que el dinero y la salud
son lo esencial de la vida, solo la conciencia lo es y te hace invulnerable.
Miyo Fiel, día de san Juan 2020
Gracias Miyo, hermano estelar!
Qué decir… como siempre, Maestro!