5 de Marzo: La impronta astrológica

Es hora de aceptar la astrología como una ciencia y deshacer los nudos esotéricos que se han adueñado de ella, otorgándole un halo místico en la que medran muchos aspirantes a convertirse en padres y madres espirituales de la humanidad ignorante. Cuando en otros tiempos los virus invisibles se postularon como causa de muchas enfermedades pasó lo mismo, como si eso sólo pudiera ser un castigo de dios o un arma enviada desde el espacio profundo por otros seres dispuestos a conquistar violentamente la tierra. Poco a poco se comprendió su manera de actuar y así floreció la ciencia médica (aunque lo haya hecho apoyada en los intereses financieros y militares, traicionando por tanto su objetivo real de crear salud por otro ficticio de matar la enfermedad).

Entre la luz, el magnetismo y la gravedad hay una intensa relación inter dimensional. Los tres son un misterio para nosotros. Sabemos lo que hacen pero no lo que son (como los virus, que se consideran hijos de ciertos aspectos del adn ignorados y rechazados por nuestra forma de vida) y, de cualquier manera, podemos ponerlos a nuestro servicio y utilizarlos de manera pragmática. De esa trinidad nace el tiempo tal y como lo conocemos.

En el centro de todo el zodiaco está el sol, que atrae hacia su núcleo a todos los planetas que le rodean, cambiando así sus condiciones naturales en cada momento. Lo más importante que el sol nos envía no es la luz ni el calor, sino un flujo de partículas magnéticas que transmiten la información del sello genético del sol en este preciso momento (aurora boreal). Esa información entra en el alma de la criatura en el momento de nacer, utilizando el vehículo de su primera respiración, y queda almacenada en el código genético. Desde ese instante la criatura será sensible a los patrones solares y planetarios, por eso a los efectos que éstos producen en su vida se llama astrología. Lo mismo que somos sensibles a la luna llena lo somos también al movimiento de los planetas, y la ciencia astrológica desarrolla las influencias que cada uno de ellos tiene sobre el código genético y el pensamiento humano.

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