Un futuro improrrogable

En el adn del cuerpo humano se han activado varios racimos de códigos galácticos, lo mismo que en el interior de la tierra, y con ellos se está purificando la memoria celular y precipitando un cambio estructural en todos nosotros. Estos códigos comienzan a transformar la realidad espacio-tiempo para toda la humanidad, tema sobre el que tratábamos hace unos días. En este proceso, el cuerpo sufrirá algunos desajustes incomprensibles a nivel médico y una cierta falta de energía. En otros planos, el juego de las almas gemelas que se reúnen de nuevo y las nuevas relaciones de pareja serán puntos importantes, pues estos temas se repiten recurrentemente en los sueños, preparando el feliz reencuentro en lo cotidiano.

Los sistemas sociales basados en el favoritismo y el dinero desaparecerán y se crearán sistemas con mucha más integridad y respeto. La llamada al servicio de la humanidad y de la tierra será general. Todos aquellos cuya vida y pensamientos están basados en la violencia, la codicia y la destrucción desaparecerán del planeta, porque no podrán asimilar las nuevas frecuencias. Todo comenzó hace años pero sólo a partir del 2008 han comenzado los cambios verdaderos.

Es un nuevo renacimiento planetario. Con los nuevos códigos galácticos está cambiando nuestra manera de percibir los campos holográficos de la realidad proyectada. Todo parte de ciertos puntos significativos entre el sol y la luna. La realidad cuántica tomará el mando de la existencia entera y todo quedará en manos de los que sepan utilizar estas leyes, pues ellos se convertirán en líderes y maestros del resto. Hay que añadir que las leyes cuánticas para ser utilizadas de manera deliberada exigen tener una conciencia pura. Las viejas leyes de newton dejarán de funcionar coherentemente. La intencionalidad con un sentimiento de amor es la clave de la nueva creación.

Las activaciones descritas actúan también sobre el resto de los seres vivos del planeta: árboles, animales, aves… Los cambios en la memoria celular influyen en todas partes. Habrá nuevos contratos del alma para cada uno de nosotros y los viejos quedarán cancelados, como si se tratara de una reencarnación en vida. Se trata de crear el plan divino sobre la tierra, y para ello cada alma tendrá acceso a la verdad, a su propia y particular manera.

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