15 de Noviembre: Ojo avizor ante las canalizaciones

Son varias las personas que me preguntan sobre la manera de saber si un canal es adecuado, si los mensajes que recibe son auténticos, pero no es fácil establecer la línea divisoria y necesariamente hay que dejar paso a la intuición y a las sensaciones personales. Hay personas que nos ponen en tensión, que levantan un cierto estado de alerta en cuanto comienzan a jugar con el tema de las canalizaciones, seguramente porque siguen en contacto con los planos y seres que habitan los mundos astrales, y emiten frecuencias de un cierto personalismo interesado en lo que dicen. Pero no todo lo que viene del astral tiene que estar teñido de engaño o negatividad, muchas veces está simplemente coloreado de parcialidad o de falta de visión global.

Hay seres en esos planos que quieren cerrar su relación con el karma pendiente, y lo hacen ayudando a gentes encarnadas, transmitiéndoles un cierto nivel de enseñanza y un contacto con los planos sutiles. Así pagan sus deudas y siguen su evolución. Pero allí también hay seres cerrados al espíritu que se hacen llamar maestros ascendidos. Asimismo nos encontramos con el otro yo, nuestra contrapartida tras el espejo, que cita antiguas escrituras y repite verdades bien conocidas. La única manera de seleccionar entre todo este conjunto de seres es distinguir intuitivamente su frecuencia vibratoria y analizar el contenido de sus mensajes, que en los casos más señalados se vuelven repetitivos y poco originales. No hay que olvidar el peligro de que algunas de estas entidades astrales tomen el mando de la vida del canalizador o telépata, que lleguen a poseerlo, situación que luego es muy difícil de resolver y que se parece mucho a algunas alteraciones de tipo psiquiátrico.

Hay que invocar únicamente a seres del mundo crístico, que estén vinculados al proceso de ascensión de la tierra y a nadie más. Desde la presencia yosoy podemos ordenar que se instaure un filtro que no deje pasar a las entidades ajenas al espíritu. Los verdaderos mensajeros vibran en octavas de frecuencia muy altas y su manifestación no deja lugar a dudas.

Por otro lado hay que funcionar desde el sentido común y cotejar con nuestra propia vida los mensajes que recibimos y los reconocimientos que estos mensajes nos otorgan. Es mejor estar alertas y negarse a la relación con un contacto sospechoso, porque una vez que estas relaciones con seres del plano astral se profundizan luego es muy difícil salir de allí, incluso con ayuda cualificada. Estos contactos con seres del plano astral separados del espíritu, y por tanto pertenecientes a la oscuridad, sólo puede darse con personas que tienen una deuda kármica lejana de negación y rechazo ante ese mismo espíritu. Este es el sentido de esas etapas de locura que sirven para pagar el karma acumulado en la relación con dios.

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