14 de Marzo: Un segundo sol en nuestro sistema
Nos llegan un buen ramillete de noticias cruzadas sobre el inmediato encendido de júpiter como segundo sol de nuestro sistema y ciertamente los mensajes son suficientemente sorprendentes para levantar nuestras alertas. Porque desde hace veinte años todas las noticias que nos llegan desde las canalizaciones estelares (y que podrían corroborarse experimentalmente), se han demostrado como fallidas o se han pospuesto sin remedio para más adelante. Sin duda que llegará un día en que por fin estalle la burbuja de la ilusión, pero aún no ha llegado ese día. Científicamente se han detectado muchas alteraciones recientes y de gran intensidad en la atmósfera joviana, pero como es natural nada parece justificar la conversión de un planeta en inminente estrella, algo que jamás ha sido observado hasta el momento.
Las noticias afirman que a nivel etérico ya se ha producido el cambio y que ahora falta esperar a que la explosión suceda en los niveles de la materialidad, que en principio serán fácilmente observables a simple vista. Cuatro días después del nacimiento del nuevo sol, una masa incalculable de protones llegará a la tierra, aunque no correremos ningún riesgo por ello. En realidad este tema del riesgo depende de la distancia a que se encuentren la tierra y júpiter en el momento del encendido (en este momento en que escribo están muy lejos, pero habrá que esperar a ver qué sucede en el momento oportuno).
Por si fuera poco se habla también, en muchos mensajes llegados aparentemente de la flota galáctica, de la necesidad de inmovilizar a toda la población mundial por un periodo indeterminado de tiempo (en estado de suspensión vital) en cuanto el nuevo sol nos ilumine, con el objetivo de purificar la tierra, crear nuevos sistemas financieros y separar algunas almas de otras. Tanto los humanos como los mamíferos superiores dormirán el tiempo necesario para que el cambio pueda producirse y el resto de la naturaleza seguirá su curso adaptándose a las nuevas energías. Durante la inmovilización algunos despertaremos para visitar la tierra interna o alguna de las naves nodriza. Hay pueblos enteros que serán transferidos a otros planos dimensionales (especialmente en el pacífico) y debido a la superpoblación terrestre muchos millones de personas acabarán viviendo el resto de su encarnación actual en las naves.
De cualquier manera tanto en la evacuación como en la desmaterialización inmediata (en el caso improbable de holocausto nuclear, que es la técnica preferida de los illuminatti), muchos cuerpos humanos no resistirán el cambio, aunque las almas serán protegidas por un encapsulamiento que las volverá inmunes a la radiación. En general necesitamos permanecer en el planeta y colaborar en la sanación de los cuatro elementos de la naturaleza, además de transmutar la conciencia de la psicosfera o quinto elemento etérico. Por eso la evacuación será muy limitada en el caso de elegirse ese camino, y las gentes conscientes seguirán trabajando en la biosfera terrestre o en las ciudades intra terrenas.
.-.-.-.-.-.-.-.-.-.