14 de Julio: El corazón de fuego de la madre Tierra

En círculo y recordando el corazón de la humanidad en los lugares sagrados que rodean a la Jerusalem celeste, recitamos la invocación: “Me uno a todos los seres que han despertado a la conciencia crística, uniendo los opuestos de luz y oscuridad, y a todos los que trabajan para el cambio planetario. Me conecto al corazón sagrado de la madre Tierra y del centro universal de Nebadón. Y como un solo corazón, una sola mente y un solo espíritu todos los aquí presentes en esta rueda medicinal invocamos la presencia y colaboración de todos los maestros ascendidos de las cuatro direcciones, especialmente los relacionados con el rayo violeta de la purificación (Saint Germain, Kwan Yin y demás), para que juntos focalicemos nuestras fuerzas en el vórtice del medio oriente para limpiar y transmutar toda la energía negativa del pasado y el presente hacia la perfección divina y el amor universal. Lo pedimos en el nombre del espíritu crístico en nuestro corazón, en armonía con todo y para que se realice el plan divino de luz y amor sobre la Tierra”. Visualizamos la luz violeta rodeando los lugares en conflicto, con un sentimiento de paz, de perdón y de amor en los corazones, y finalmente lo envolvemos todo con luz dorada, agradeciendo su presencia a todos los seres invocados.

Comienza a realizar todos tus sueños por locos que parezcan.
De esta manera encontrarás tu don en la nueva energía.
La magia y el poder interno se esconden en la temeridad
y en el valor de correr riesgos.
Si estás dispuesto a entregar hasta tu vida por lo que deseas, nada podrá oponerse a tu voluntad.

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